¿Qué son los estilos de natación?
Los estilos de natación son las formas de nadar que se utilizan en las competiciones deportivas o en la práctica recreativa y se caracterizan por la posición del cuerpo, la respiración y el ritmo. Existen cuatro estilos de natación principales, que son: crol, espalda o dorso, braza o pecho y mariposa. Cada uno de ellos tiene sus características, ventajas y reglas específicas. A continuación, te explicamos en qué consiste cada uno de ellos y qué beneficios te aportan.
La natación es una actividad física que consiste en desplazarse por el agua mediante movimientos coordinados de brazos y piernas. La natación tiene muchos beneficios para la salud, como mejorar la capacidad cardiovascular, fortalecer los músculos, prevenir lesiones y relajar la mente. Además, la natación es un deporte muy completo, ya que se pueden practicar diferentes estilos que implican distintas técnicas y habilidades.
Estilo crol
Es el estilo más rápido y popular de la natación. Consiste en nadar boca abajo, moviendo los brazos alternativamente por encima del agua y realizando un batido constante de piernas. La respiración se hace girando la cabeza hacia un lado cada dos o tres brazadas. Se puede alternar el lado hacia el que sacamos la cabeza para respirar, izquierda y derecha.
El estilo crol te ayuda a mejorar tu resistencia, velocidad y coordinación. Además, es el estilo más fácil de aprender y el que menos desgaste produce en las articulaciones.
Estilo espalda
Es el estilo que se nada boca arriba, moviendo los brazos alternativamente por detrás de la cabeza y realizando un batido similar al del crol. La respiración se hace de forma natural, sin necesidad de girar la cabeza.
El estilo espalda te permite trabajar la musculatura dorsal, lumbar y abdominal. También mejora tu postura corporal y tu flexibilidad. Es el estilo que se recomienda para aliviar dolores de espalda.
Estilo braza o estilo pecho
Es el estilo más lento y antiguo de la natación. Consiste en nadar boca abajo, haciendo un movimiento circular con los brazos por debajo del agua y una patada simultánea con las piernas flexionadas. La respiración se hace elevando la cabeza cada vez que se juntan las manos al frente.
El estilo braza te permite desarrollar la fuerza y la potencia muscular. También mejora tu capacidad pulmonar y tu ritmo cardíaco.
Estilo mariposa
Es el estilo más difícil y exigente de la natación. Consiste en nadar boca abajo, haciendo un movimiento sincronizado con los brazos por encima del agua y una patada ondulatoria con las piernas juntas. La respiración se hace elevando la cabeza cada vez que se llevan los brazos hacia atrás.
El estilo mariposa te permite quemar muchas calorías y tonificar todo el cuerpo. También mejora tu coordinación y tu equilibrio.
Los estilos de natación son una forma de diversificar y mejorar el entrenamiento acuático. Además, aportan diferentes beneficios, ya que al nadar cada uno se trabajan distintas partes de nuestro cuerpo.
Como ves, cada estilo de natación tiene sus ventajas y sus desafíos. Lo ideal es que practiques todos ellos para obtener todos los beneficios que te ofrece este deporte tan completo y saludable. ¿Te animas a probarlos?